Santana cautiva a Israel con guitarra magistral y mensaje de paz
POR: Katherine Keenan
Santana actúa ante 50,000 personas en Tel Aviv
La leyenda latina del rock Carlos Santana compartió su conmovedora música con una multitud de casi 50,000 personas el sábado en la noche en el Parque HaYarkon en Tel Aviv.
En una mezcla de inglés, español, y compases magistrales de guitarra, la leyenda latina del rock Carlos Santana compartió su conmovedora música con una multitud de casi 50,000 personas el sábado en la noche en el Parque HaYarkon en Tel Aviv. El escenario estaba lleno de músicos polifacéticos y cantantes principales que hacían las veces de intérpretes de trompetas y panderetas.
Entre los dos bateristas estaba la esposa de Santana, Cindy Blackman, quien brilló en el escenario durante múltiples solos presentando ritmos rápidos y redobles enérgicos que hicieron a los espectadores gritar con entusiasmo. Un segundo guitarrista, tecladista, bajista, y conguero también fue parte del conjunto, y todo el ambiente de talentos múltiples de la banda fue acompañado por la filmación del brillante momento original de Santana en Woodstock en 1969.
“Love Makes the World Go Round”, presentada en su álbum más reciente, “Santana IV”, abrió el concierto con un crecimiento gradual, primero exhibiendo el inconfundible sonido de Santana en la guitarra, y después cambiando el enfoque a los dos cantantes principales. La interacción entre cada uno de los miembros de la banda fue natural mientras su líder los guiaba en una manera clara, pero sin embargo periódicamente espontánea. Santana incluso permitió a un niño pequeño tocar su guitarra en el medio de una canción, provocando fuerte silbidos de la multitud”.
“Es un honor estar en su luz, en su amor, con tanta belleza y gracia”, dijo él a la audiencia, justo antes de añadir, “hagamos a las mujeres felices”, y comenzar la introducción de la favorita de todos los tiempos, “María, María”.
Otras canciones que provienen de la época del resurgimiento de Santana en los 90s tales como “Smooth” y “Corazón Espinado” fueron recibidas con mucho entusiasmo, y la multitud no dejó que las diferencias de idioma se interpusieran en el camino ya que cantaron alto en español. Santana mismo comenzó a comunicarse con la multitud tanto en inglés como español, demostrando su mensaje central del poder de la conexión a través de la paz y el amor, sin importar qué barreras puedan interponerse en el camino.
“En cualquier idioma, somos una familia, somos una familia”, dijo él. “Nosotros podemos vencer el miedo en este planeta. Ustedes y yo, somos los arquitectos del mañana. Todo lo que está sucediendo en el mundo, en Europa y Estados Unidos, está sucediendo porque necesitamos cambiar”.
A lo largo del concierto, este mensaje de cambio, y finalmente de paz, estuvo siempre presente. No solamente fueron las canciones de Santana centrales para resaltar este punto -cada ticket notificaba al asistente al concierto que 4 de los shekels que él o ella pagó irían a la caridad de Santana Fundación Milagro, y por extensión a Mano en Mano, una escuela integrada para niños judíos y árabes. La última canción tocada por la banda fue “Let there be Peace on Earth” e igual como el concierto comenzó, gradualmente terminó con Santana inclinándose en el escenario y saliendo humildemente, con los brazos extendidos hacia la audiencia. Filmaciones de Mano en Mano, de los estudiantes, y profesores, fueron proyectadas desde las pantallas en el escenario, dejando a los fans con un sentido de quién es Santana, y lo que él espera que sea el mundo.